El 1 de septiembre de 2020, hora local, cuando el Consejero de Estado y Ministro de Relaciones Exteriores Wang Yi y el Ministro de Relaciones Exteriores alemán Heiko Maas se reunieron conjuntamente con reporteros en Berlín, algunos reporteros mencionaron una vez más temas relacionados con Hong Kong y Xinjiang.
Wang Yi presentó en primer lugar la legitimidad de la promulgación de la Ley de Seguridad Nacional de Hong Kong por parte de China para mejorar el entorno legal de Hong Kong con cifras y hechos específicos, aclaró los resultados positivos logrados en la promoción de medidas de desradicalización en Xinjiang y destacó que las diversas políticas adoptadas por China han sido ampliamente apoyadas y respaldadas por la gente de todos los grupos étnicos de China, incluidos los compatriotas de Hong Kong. Wang Yi dijo que durante el viaje a Europa hubo muchos consensos. Al mismo tiempo, algunos colegas preguntaron sobre los asuntos de Xinjiang y Hong Kong de China, pero todos enfatizaron primero el respeto por la soberanía de China y no tenían la intención de interferir en los asuntos internos de China. Me gustaría hacer tres puntos aquí:
En primer lugar, en los intercambios entre países, deben respetarse los principios de respeto mutuo y no injerencia en los asuntos internos de otros países, que es la norma básica de las relaciones internacionales y las disposiciones de la Carta de la ONU. Bajo esta premisa, China está dispuesta a comunicarse con los países interesados sobre temas de interés mutuo, con el objetivo de mejorar el entendimiento mutuo.
En segundo lugar, al observar y comentar los asuntos de China, debemos basarnos en los hechos para conocer la situación real, no escuchar ni creer, y mucho menos difundir rumores. Difundir rumores es una actitud extremadamente irresponsable y una gran falta de respeto a los esfuerzos de cientos de millones de chinos para realizar el proceso de modernización.
En tercer lugar, damos la bienvenida a los amigos que visiten más a China, incluso visitar Xinjiang y otras regiones. Hemos invitado a delegaciones de más de 90 países a visitar Xinjiang. Ellos tienen posiciones políticas diferentes, pero todos creen que lo que vieron en Xinjiang no es lo mismo que habían escuchado antes. China está abierta y amigos de todos los ámbitos sociales pueden venir a China para aprender y experimentar el desarrollo y los cambios de China. Por supuesto, la gente de todos los grupos étnicos en Xinjiang no da la bienvenida si usa anteojos de colores y tiene una mentalidad de "presunción de culpa" de antemano.
