El 18 de marzo de 2024, hora local, el miembro del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de China (PCCh) y ministro de Relaciones Exteriores, Wang Yi, se reunió con el ministro de Comercio de Nueva Zelanda, Todd McClay, en Wellington.
Wang Yi dijo que, desde el establecimiento de relaciones diplomáticas entre China y Nueva Zelanda, las dos partes siempre se han adherido al respeto mutuo, la inclusión recíproca, el enfoque en la cooperación y el beneficio para los pueblos y constantemente han establecido nuevos récords de cooperación, gracias a lo cual, las relaciones chino-neozelandesas siempre han llevado la delantera en las relaciones entre China y los países desarrollados. Este es el valor importante y único de las relaciones China-Nueva Zelanda. China está dispuesta a trabajar con Nueva Zelanda para implementar activamente la versión mejorada del Tratado de Libre Comercio (TLC) entre China y Nueva Zelanda e iniciar lo antes posible las negociaciones sobre una lista negativa para el comercio de servicios, a fin de impulsar incesantemente la cooperación binacional a nuevos peldaños. La apertura trae el progreso, mientras que el enclaustramiento conduce al atraso. La puerta de China se abrirá aún más al mundo, y la puerta de China a Nueva Zelanda siempre se mantendrá abierta. A ambas partes les incumbe salvaguardar conjuntamente el libre comercio, oponerse al unilateralismo y al proteccionismo en nombre de la “reducción de riesgos”, construir una economía mundial abierta y proporcionar a las empresas de ambos países un buen entorno empresarial.
Todd McClay afirmó que, desde el establecimiento de relaciones diplomáticas entre Nueva Zelanda y China, la cooperación bilateral ha dado resultados fructíferos y ha aportado importantes beneficios a los dos pueblos. Nueva Zelanda tiene la voluntad de trabajar con China para ampliar aún más la cooperación en campos como economía y comercio y facilitar el intercambio de personal. Ante las crecientes barreras comerciales e incertidumbres en el mundo, la versión mejorada del TLC entre China y Nueva Zelanda reviste una gran importancia ejemplar. Las dos partes deberían trabajar de la mano para defender el principio del libre comercio y resistirse a todo tipo de proteccionismo y acciones unilaterales.