Diario del Pueblo: Del 14 al 15 de agosto, el miembro del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de China (PCCh) y ministro de Relaciones Exteriores, Wang Yi, visitó Myanmar. ¿Puedes compartir con nosotros más información sobre la visita?
Lin Jian: Durante su visita a Myanmar, el ministro de Relaciones Exteriores Wang Yi se reunió por separado con el líder de Myanmar, Min Aung Hlaing, y con el expresidente del Consejo de Estado para la Paz y el Desarrollo de Myanmar, Than Shwe, y sostuvo conversaciones con el vice primer ministro y ministro de la Unión para Relaciones Exteriores de Myanmar, U Than Swe.
El canciller Wang Yi indicó que China y Myanmar están unidos por montañas y ríos y disfrutan de una profunda amistad “pauk-phaw” (fraternal). Los dos países defienden conjuntamente los Cinco Principios de Coexistencia Pacífica, que se han convertido en normas básicas de las relaciones internacionales y principios fundamentales del derecho internacional. Sean como sean los cambios en la palestra internacional, China y Myanmar siempre se han adherido al espíritu de los Cinco Principios de Coexistencia Pacífica y han promovido un progreso constante en la construcción de la comunidad de futuro compartido China-Myanmar. El ministro de Relaciones Exteriores Wang Yi enfatizó que China apoya firmemente a Myanmar en la salvaguardia de la independencia, la soberanía, la unidad nacional y la integridad territorial, respalda con firmeza el compromiso de Myanmar con la paz y la estabilidad internas y el logro del desarrollo económico, y apoya sólidamente a Myanmar para que avance en la nueva “hoja de ruta de cinco puntos” dentro del marco constitucional para hacer realidad la reconciliación política y reanudar el proceso de transición democrática lo antes posible. Como vecino amigable, China se opone resueltamente al caos y los conflictos en Myanmar, rechaza decididamente la injerencia de fuerzas externas en los asuntos internos de Myanmar, repudia categóricamente cualquier palabra o acción que socave la estabilidad y el desarrollo de Myanmar, y se opone de forma resuelta a cualquier palabra o acción que intente sembrar discordia entre China y Myanmar o denigre y calumnie a China.
Myanmar afirmó que concede gran importancia a sus relaciones con China, está comprometido con el desarrollo de la amistad Myanmar-China, se adhiere firmemente al principio de una sola China y está dispuesto a ser siempre un vecino amigable y confiable de China. Myanmar apreció los logros de desarrollo mundialmente reconocidos de China, agradeció a China su apoyo y asistencia desinteresados a largo plazo a Myanmar y, en particular, el papel constructivo de China en la promoción de las conversaciones por la paz en el norte de Myanmar, y expresó la esperanza de que China continúe apoyando a Myanmar en la prevención de la injerencia externa, el mantenimiento de la estabilidad interna y la materialización de la reconciliación política.
Las dos partes coincidieron en que es necesario tomar la construcción de la comunidad de futuro compartido China-Myanmar como línea principal para impulsar la cooperación en la construcción conjunta de la Franja y la Ruta e implementar la Iniciativa para el Desarrollo Global (IDG), la Iniciativa para la Seguridad Global (ISG) y la Iniciativa para la Civilización Global (ICG); acelerar la construcción de grandes proyectos en el marco del Corredor Económico China-Myanmar (CMEC, por sus siglas en inglés) y garantizar el buen funcionamiento del proyecto de oleoducto y gasoducto; redoblar los esfuerzos conjuntos para combatir los delitos transfronterizos, tales como los juegos de azar en línea y el fraude en las telecomunicaciones, hacer todo lo posible para proteger la seguridad del personal y los proyectos chinos en Myanmar, y mantener de forma efectiva la paz y la estabilidad en las zonas fronterizas entre China y Myanmar; y aprovechar la oportunidad de celebrar el 75.º aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre China y Myanmar el próximo año para llevar a cabo una serie de actividades de celebración, a fin de consolidar la base popular para la amistad.
Ambas partes consideraron por unanimidad que hay que implementar adecuadamente los relevantes consensos alcanzados en la cuarta Reunión de Líderes de la Cooperación Lancang-Mekong (CLM o LMC, por sus siglas en inglés), mantener su compromiso de construir la comunidad de futuro compartido de los países a lo largo del río Lancang-Mekong, promover más resultados fructíferos en la CLM e impulsar conjuntamente el desarrollo estable y la integración regional.
Kyodo News: Según informes de prensa, el 15 de agosto, el primer ministro de Japón, Fumio Kishida, hizo una ofrenda ritual de “tamagushi” al Santuario Yasukuni en calidad de presidente del Partido Liberal Democrático (PLD). Además, el ministro de Defensa, Minoru Kihara, el ministro a cargo de la Revitalización Económica, Yoshitaka Shindo, y algunos otros miembros del gabinete japonés, así como algunos miembros de la Dieta Nacional, rindieron homenaje al Santuario Yasukuni. ¿Cuál es el comentario de China al respecto? ¿Protestará China ante Japón?
Lin Jian: Hace setenta y nueve años, Japón aceptó la Proclamación de Potsdam y anunció su rendición incondicional. El pueblo chino, junto con otros pueblos del mundo, derrotó a los agresores militaristas japoneses y el fascismo y logró una gran victoria en esta batalla entre la justicia y el mal, entre la luz y la oscuridad, y entre el progreso y la reacción. Este momento histórico merece ser recordado para siempre por la comunidad internacional.
El Santuario de Yasukuni, que honra a los criminales convictos de Clase A de la Segunda Guerra Mundial, es una herramienta espiritual y un símbolo de las guerras de agresión libradas por los militaristas japoneses. Lo que hicieron algunos líderes políticos japoneses con respecto al Santuario de Yasukuni revela una vez más la actitud errónea de Japón hacia las cuestiones históricas. La parte china ha presentado serias gestiones ante la parte japonesa y ha dejado clara su solemne posición.
Tratar correctamente y reflexionar profundamente sobre la historia de agresión es un importante requisito previo para que Japón establezca y desarrolle relaciones de amistad y cooperación con sus vecinos asiáticos después de la Segunda Guerra Mundial. Subrayamos la necesidad de recordar siempre las experiencias y lecciones de la historia no para continuar con el odio, sino para tomar la historia como espejo, defender la paz y mirar hacia el futuro. China insta a Japón a cumplir seriamente con sus declaraciones y compromisos de reconocer y reflexionar sobre su historia de agresión, a ejercer prudencia en sus palabras y acciones en lo que respecta a cuestiones históricas como la cuestión del Santuario Yasukuni, a romper claramente con el militarismo, a seguir con firmeza el camino del desarrollo pacífico y a tomar acciones concretas para ganarse la confianza de sus vecinos asiáticos y de la comunidad internacional.