El 27 de marzo de 2024, el presidente Xi Jinping se reunió colectivamente con representantes de las comunidades empresarial, estratégica y académica de Estados Unidos, en el Gran Palacio del Pueblo, en Beijing.
Xi Jinping dio la bienvenida a China a personalidades de las comunidades empresarial, estratégica y académica de Estados Unidos en una floreciente primavera. Xi Jinping señaló que las relaciones China-Estados Unidos se cuentan entre las relaciones bilaterales más importantes del mundo. Si China y Estados Unidos defienden la cooperación o buscan la confrontación atañe al bienestar de los dos pueblos, así como al futuro y el destino de la humanidad. El éxito respectivo de China y Estados Unidos es una oportunidad para el otro. Siempre y cuando ambas partes se vean como socios, muestren respeto mutuo, coexistan en paz y cooperen para obtener ganancias compartidas, las relaciones entre China y Estados Unidos mejorarán. Este año se cumple el 45.º aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas entre China y Estados Unidos. La historia de las relaciones chino-estadounidenses es una historia de intercambios amistosos entre los dos pueblos. Sus capítulos actuales están escritos por los pueblos y, por supuesto, el futuro será creado por los pueblos. Como dice un refrán chino, hacer el bien es tan difícil como subir una colina, mientras que un paso en falso puede conducir fácilmente a una caída libre. Xi Jinping expresó la esperanza de que personajes de todos los sectores sociales de ambos países realicen más visitas mutuas e intercambios, acumulen constantemente consensos, mejoren la confianza mutua, eliminen todo tipo de interferencias y profundicen la cooperación mutuamente beneficiosa, en un esfuerzo por aportar más beneficios tangibles a los dos pueblos e inyectar más estabilidad al mundo.
Xi Jinping escuchó atentamente a los representantes estadounidenses y respondió a las cuestiones de interés para ellos.
Xi Jinping señaló que la economía china es saludable y sostenible. El año pasado, China registró una de las tasas de crecimiento más altas entre las principales economías del mundo y representó más del 30% del crecimiento económico mundial como antes. Esto se debió tanto al arduo trabajo del pueblo chino como a la cooperación internacional. China ha llegado a donde está hoy después de superar todo tipo de dificultades y desafíos. China no colapsó como predice la “teoría del colapso de China”, ni alcanzará su punto máximo como lo pronostica la “teoría del pico de China”. China continuará impulsando el desarrollo de alta calidad y la modernización china, no solo para permitir que el pueblo chino lleve una vida cada vez mejor, sino también para hacer mayores contribuciones al desarrollo sostenible en el mundo. “Tenemos la confianza y la determinación de que el desarrollo de China tiene un futuro brillante”, afirmó el mandatario chino.
Xi Jinping indicó que, como ha afirmado en repetidas ocasiones, la reforma y la apertura son la clave para que la China contemporánea se ponga al día con los tiempos a grandes pasos. La reforma de China no se detendrá y su apertura no cesará. China está planificando e implementando una serie de medidas importantes para profundizar integralmente la reforma y crear constantemente un entorno de negocios de primer orden mercadizado, sujeto al imperio de la ley e internacionalizado. Esto ofrecerá un espacio de desarrollo más amplio a las empresas estadounidenses y otras empresas extranjeras. Ante las nuevas situaciones y cambios en las relaciones económicas y comerciales entre China y Estados Unidos en los últimos años, a ambas partes les incumbe adherirse al respeto recíproco, el beneficio mutuo y las consultas en pie de igualdad, seguir las leyes económicas y las reglas del mercado, expandir y profundizar la cooperación comercial mutuamente beneficiosa, respetar los derechos de desarrollo de cada uno y trabajar para lograr resultados de ganancia compartida para ambos países y el mundo en general. Las empresas estadounidenses son bienvenidas a participar más en la construcción conjunta de la Franja y la Ruta, asistir a eventos económicos y comerciales a gran escala como la Exposición Internacional de Importaciones de China (CIIE, por sus siglas en inglés) y continuar invirtiendo en China, profundizando su huella en China y obteniendo ganancias en China.
Xi Jinping enfatizó que, en los últimos dos años, las relaciones entre China y Estados Unidos han experimentado algunos reveses y desafíos serios, de los cuales vale la pena aprender lecciones. Las relaciones China-Estados Unidos no pueden volver a los viejos tiempos, pero pueden tener un futuro mejor. Xi Jinping dijo que el consenso más importante que alcanzó con el presidente Joe Biden durante su encuentro en San Francisco el año pasado fue sobre la necesidad de estabilizar y mejorar las relaciones entre China y Estados Unidos. En los últimos meses, los equipos de ambas partes, centrándose en los consensos alcanzados por los dos líderes, se han mantenido en comunicación y han logrado avances en ámbitos como política y diplomacia, economía, comercio y finanzas, aplicación de la ley y control de drogas, cambio climático e intercambios culturales y de pueblo a pueblo. En las circunstancias actuales, China y Estados Unidos tienen más intereses comunes, no menos. China y Estados Unidos deberían ayudarse mutuamente, en lugar de obstaculizarse, tanto en áreas tradicionales como economía, comercio y agricultura, como en campos emergentes como cambio climático e inteligencia artificial (IA o AI, por sus siglas en inglés). Promover la recuperación económica mundial y resolver las cuestiones candentes internacionales y regionales requiere que China y Estados Unidos lleven a cabo la coordinación y la cooperación, y muestren su visión y su sentido de compromiso como grandes países. La parte estadounidense debería avanzar en la misma dirección que China, desarrollar una percepción estratégica correcta de cada uno, manejar adecuadamente las cuestiones delicadas, mantener el impulso de recuperación y estabilización de las relaciones China-Estados Unidos, explorar activamente la manera correcta de llevarse bien, y promover el desarrollo sostenido, estable y sano de las relaciones entre China y Estados Unidos.
En sus declaraciones, el presidente de la Junta Directiva del Comité Nacional de Relaciones entre Estados Unidos y China (NCUSCR, por sus siglas en inglés), Evan G. Greenberg, el presidente y director ejecutivo de Blackstone, Stephen A. Schwarzman, el presidente y director ejecutivo de Qualcomm, Cristiano R. Amon, el decano fundador de la Escuela de Gobierno John F. Kennedy de la Universidad de Harvard, Graham Allison, y el presidente del Consejo Empresarial Estados Unidos-China (USCBC, por sus siglas en inglés), Craig Allen, entre otros representantes estadounidenses, expresaron su gratitud al presidente Xi Jinping por tomarse el tiempo para reunirse con ellos. Dijeron que el crecimiento y la transición económicos excepcionales de China en las últimas décadas han mostrado su fuerte resiliencia y vitalidad. Bajo el extraordinario liderazgo del presidente Xi Jinping, China está comprometida a desarrollar nuevas fuerzas productivas de calidad y lograr un desarrollo de alta calidad que sea más sostenible. Los derechos del pueblo chino al desarrollo deberían respetarse. Expresaron su confianza en que China alcanzará sus objetivos de desarrollo y contribuirá a una economía mundial más fuerte y más integrada. Una China fuerte y próspera es una fuerza positiva en el mundo. Al compartir estrechos vínculos económicos, Estados Unidos y China solo pueden desarrollarse y prosperar en una coexistencia pacífica. La “trampa de Tucídides” no es inevitable. Empresas estadounidenses aprecian las importantes medidas que China ha introducido recientemente para profundizar la reforma y la apertura, son optimistas sobre las perspectivas de desarrollo de China, continuarán profundizando inquebrantablemente su huella en China y desarrollarán una relación de cooperación estrecha y de largo plazo con China. El exitoso encuentro entre el presidente Xi Jinping y el presidente Joe Biden en San Francisco en noviembre del año pasado ha mejorado las expectativas y la confianza de todos los sectores sociales de Estados Unidos y del mundo en las relaciones entre Estados Unidos y China. Las comunidades empresarial, estratégica y académica de Estados Unidos apoyan a Estados Unidos y China para que fortalezcan las interacciones y los intercambios a todos los niveles, mejoren el entendimiento mutuo, la confianza y la cooperación, trabajen de la mano para abordar los desafíos globales y promuevan unas relaciones estables, sostenibles y productivas entre Estados Unidos y China.
Wang Yi estuvo presente en la reunión.