PREGUNTA: El 29 de julio, el Departamento de Estado de EE.UU. dio a conocer el Informe de 2013 sobre la Libertad Religiosa Internacional que designa de nuevo a China como un país de especial preocupación. ¿Cuál es su comentario al respecto?
RESPUESTA: El gobierno chino protege la libertad de creencia religiosa de los ciudadanos chinos de acuerdo con la ley, y el pueblo chino tiene pleno derecho a esa libertad prevista en la ley. La parte norteamericana ignora completamente el hecho, y distorsiona y ataca a las políticas de China sobre la religión mediante la emisión de tal informe, a lo que nos oponemos firmemente y hemos hecho severas gestiones con la parte norteamericana al respecto. Instamos a la parte norteamericana a descartar su prejuicio político y dejar de interferir en los asuntos internos de China bajo el pretexto de la religión.