El 29 de marzo de 2024, el miembro del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de China (PCCh) y ministro de Relaciones Exteriores, Wang Yi, se reunió en Beijing con el ex primer ministro de Japón y expresidente del Foro de Boao para Asia (BFA, por sus siglas en inglés), Yasuo Fukuda.
Wang Yi expresó su aprecio a Yasuo Fukuda por siempre brindar su interés y hacer contribuciones positivas al desarrollo del BFA, y dijo que el siglo XXI es el siglo de Asia. La actual situación internacional está repleta de cambios y desorden, con factores de inestabilidad significativamente más fuertes, pero Asia en general se mantiene pacífica y estable y goza de brillantes perspectivas de desarrollo. Wang Yi expresó su esperanza de que Japón y otros países de la región realicen más acciones que conduzcan a la paz y la estabilidad regionales, en lugar de lo contrario, y trabajen con China para salvaguardar la paz y el desarrollo de Asia.
Wang Yi dijo que los líderes de China y Japón alcanzaron importantes consensos a finales del año pasado, reafirmaron el posicionamiento de promover integralmente las relaciones estratégicas mutuamente beneficiosas entre los dos países, y expresaron el compromiso con la construcción de las relaciones chino-japonesas constructivas y estables en concordancia con las demandas de la nueva era, proporcionando una relevante orientación política para el desarrollo de los lazos binacionales. Se espera que Japón avance en la misma dirección que China, comprenda las relaciones chino-japonesas desde una altura estratégica y con una visión de largo alcance, maneje de manera seria y adecuada los problemas que obstaculizan el desarrollo normal de las relaciones bilaterales, incluida la descarga al mar del agua contaminada con energía nuclear de Fukushima, y se adhiera a la dirección establecida del desarrollo pacífico, con miras a promover conjuntamente la materialización de un desarrollo estable y saludable de las relaciones China-Japón.
Yasuo Fukuda afirmó que la creciente influencia del BFA demuestra que China está logrando cada vez más resultados positivos en la promoción de la diplomacia de buena vecindad. La amistad entre Japón y China es una elección común e inevitable para ambos países, y las empresas japonesas esperan invertir y hacer negocios en China. Japón tiene la voluntad de mejorar el entendimiento mutuo con China, fortalecer el diálogo y la comunicación y controlar adecuadamente las divergencias, a fin de promover en común las relaciones estratégicas mutuamente beneficiosas entre Japón y China y mantener de forma mancomunada el buen impulso de paz, estabilidad y prosperidad en Asia.
