El 15 de noviembre de 2023, hora local, el presidente Xi Jinping sostuvo un encuentro con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, en San Francisco, Estados Unidos. Tras el encuentro, el miembro del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de China (PCCh) y ministro de Relaciones Exteriores, Wang Yi, informó a medios de comunicación sobre la situación y respondió a sus preguntas.
En respuesta a una pregunta sobre si las dos partes hablaron sobre las divergencias y las cuestiones delicadas y cuáles son la posición y la actitud de China, Wang Yi dijo que el presidente Xi Jinping destacó que China siempre se dedica a la construcción de unas relaciones chino-estadounidenses estables, sanas y sostenibles. Al mismo tiempo, China tiene intereses que deben ser salvaguardados, principios que deben ser defendidos y líneas rojas que no deben ser cruzadas. Si Estados Unidos insiste en asediar y reprimir a China en nombre de la competencia, China salvaguardará con firmeza su soberanía, seguridad e intereses de desarrollo.
La cuestión de Taiwán siempre ha sido la más importante y la más sensible de las relaciones chino-estadounidenses. El presidente Xi Jinping expuso a fondo la posición de principios de China al respecto. China exige a Estados Unidos que se adhiera al principio de una sola China, se oponga a la “independencia de Taiwán”, deje de armar a Taiwán, se abstenga de injerirse en los asuntos internos de China, y apoye la reunificación pacífica de China.
El presidente Xi Jinping también dejó clara la posición de China sobre las cuestiones económicas, comerciales, científicas y tecnológicas, señalando que la contención y la represión de China por parte de Estados Unidos en los campos económico, comercial, científico y tecnológico no están “reduciendo riesgos”, sino creando riesgos. Estas prácticas erróneas y la consiguiente incertidumbre en las relaciones entre China y Estados Unidos se han convertido en el mayor riesgo. Reprimir la ciencia y la tecnología de China equivale a frenar el desarrollo de alta calidad de China y a privar al pueblo chino de su derecho al desarrollo. El canciller chino afirmó: “Nunca aceptaremos esto y tales intentonas de ninguna manera tendrán éxito”. El desarrollo y el crecimiento de China, propulsados por una fuerte fuerza motriz endógena y su lógica histórica, no serán detenidos por ninguna fuerza externa. Es importante que Estados Unidos tome en serio las preocupaciones de China, levante las sanciones unilaterales y cree un entorno equitativo, justo y no discriminatorio a las empresas chinas.
